Dona havia de ser: ¿Quién se esconde detrás de Lola Mendieta?

Estoy impaciente por ver que pasa esta noche en El Ministerio del Tiempo... y es que después de descubrir que Amelia Folch era un homenaje a las primeras universitarias españolas, mi curiosidad no deja de aumentar respecto a los guiños históricos que van apareciendo a lo largo de los capítulos.

Lola Mendieta, fotograma capítulo 3

En un tuit Javier Oliveres me respondió que el mérito de crear el personaje de Amelia Folch era de su hermano Pablo, y como en esta serie nada es casual me pregunto ¿quién se esconde detrás de Lola Mendieta? La respuesta en otro tuit de Javier Oliveras...Pues ni más ni menos que Marina Vega de la Iglesia ¡la única mujer en la red española al servicio de la Resistencia Francesa! ¡Mon Dieu!
Así pues, aunque una foto de Marina Vega a lo Ava Gadner ya la tenía vista en Pinterest me puse a investigar sobres las mujeres espías españolas, y aunque no son muchas y hay muy poca información sobre ellas, puedo asegurar una cosa ¡haberlas hay las! Empezamos...

Marina Vega entró en la red española de las Fuerzas Francesas Libres, al servicio de Charles de Gaulle, con sólo 17 años. Trabajó para la Resistencia Francesa, primero desde España contra el dictador Francisco Franco, y después en Francia.

Nació 1923 en Torrelavega, Cantabria. Su padre era director de prisiones con la República, fue condenado a 16 años de cárcel por "un delito consumado de masonería" y fue enviado a un penal de Cádiz. Su madre fue empleada del Gobierno de la República, y tenía que vivir escondida para no ser represaliada. Para proteger a Marina, la enviaron a Paris con unos amigos. Estando allí comenzó la Segunda Guerra Mundial.

La familia que la acogió se trasladó a México, y Marina regresó a España, en Madrid consiguió localizar a sus padres y después se marchó a León con unos amigos. Allí conoció a un joven diplomático francés. El servicio secreto necesitaba a una mujer española no fichada y que pudiera moverse con libertad por el país y fue admitida. Así fue como con tan solo 17 años, Marina entró en la red española de las Fuerzas Francesas Libres.

Sus primeros trabajos fueron viajes a la frontera franco-española para introducir a gente en España, no sabe con exactitud cuantos fueron porque nunca intercambió palabra alguna con aquellas personas. También llevaba y traía documentos y dinero.

Un día fueron descubiertos por la Segunda Bis (el contraespionaje español) y tuvo que huir a Francia. En territorio francés siguió haciendo trabajos de información hasta que terminó la Segunda Guerra Mundial, entonces empezó la limpieza de nazis en Francia y el resto de Europa. Su trabajo entonces pasó a ser buscar alemanes nazis y colaboracionistas para juzgarles.


Marina Vega en su casa de Madrid

(Fuente: Espías españoles: Marina Vega (Entre el Caos y el Orden Magazine)

África de las Heras: En 1937 fue reclutada por agentes de la NKVD en España y la enviaron a Moscú para instruirla. La encargada de introducirla en el espionaje fue Caridad Mercader (madre del asesino de Trotski, Ramón Mercader). Después de la instrucción, se fue a Noruega para cumplir su primera misión: infiltrarse en el equipo de Trotski, se convierte en su secretaria y viajan con ellos a México. Allí se dedicó a pasar información a la NKVD, ayudando a Ramón Mercader a organizar el asesinato de Trotski por orden de Stalin.
En sudamericana realizó numerosas misiones, sirviendo de enlace entre los diferentes espías y la sede central en Moscú. Se cree que ella fue quien trasmitió a la KGB la información de la invasión de la Bahía de Cochinos.

África de las Heras

Espías españolas: África de las Heras (Entre el Orden y el Caos)

Lola Pardo: Fue reclutada por Albert Le Lay ( el Schindler de Canfranc) que era el jefe de aduana francés. Y desde la posición que ocupaba se encargó de que documentos y fugitivos llegaran en compartimentos secretos desde la Francia ocupada y salieran del país. Entre 1940 y 1942, Lola Pardo recorrió cada 15 días el trayecto ferroviario de Canfranc a Zaragoza junto a su hermana Pilar con un paquete de secretos militares oculto en la faja. Como hijas del vigilante del túnel y cuñadas de un guardia civil, no levantaban sospechas. Con el tiempo, también ella terminó casada con un agente del cuerpo. "No le dije nada en 60 años. ¿Cómo iba a querer compartir lecho con una espía?"

Lola Pardo en la estación de Canfranc

En 60 años jamás dije a mi marido que fuí espia.
Campo, Ramon Javier: La estación espía: la clave de la derrota de los nazis en los Pirineos, Península, 2006.

Condesa de Romanones: Agente española, aunque de adopción, la estadounidense Aline Griffith, más conocida como la Condesa de Romanones, tras ser adoctrinada por la CIA, fue destinada a Madrid con un nombre en clave, Tigre, y una tapadera, un trabajo en una empresa norteamericana de petróleo.