jueves, 6 de noviembre de 2014

Francesca Bonnemaison y la Biblioteca Popular de la Dona (II)


La Biblioteca Popular de la Dona, creada el 1909 en Barcelona por Francesca Bonnemaison, fue la primera biblioteca pública femenina de Europa. Se adelantó casi veinte años a otros proyectos similares como la Fawcett Library de Londres. Tubo tanto éxito la iniciativa, que un año después de su inauguración en 1910, se convierte en instituto y traslada su sede del claustro de Santa Anna, a la Casa de la Misericordia, en la calle Elisabets.




El principal objetivo del nuevo Instituto de Cultura i Biblioteca Popular per a la Dona, era ilustrar y acercar la cultura a las mujeres. Así pues, con la voluntad de mezclar “lo útil con lo agradable”, ofrecía a las usuarias conocimientos científicos, artísticos y manuales. La combinación de estos tres tipos de educación es la que convertirá al Instituto en un centro excepcional, en lo referente a oferta cultural para las mujeres de Cataluña des de  la primera década del siglo XX. 





Las promotoras del Instituto optaron por adecuar y adaptar la propuesta formativa al “progresivo movimiento del comercio y de la industria”. Así, con visión de futuro, el centro ofrecía educación especializada para que las mujeres pudieran incorporarse al mercado laboral con conocimientos y habilidades para poder ejercer nuevas profesiones.




Al cabo de poco tiempo, el Instituto creó la sección de Industrias artísticas y puso en marcha talleres. La idea no era nueva, sino que recogía la experiencia que el movimiento del Arts and Crafts había promovido en algunos países europeos, i que contaba con una alta participación de las mujeres.



El Instituto de Cultura, a través de Francesca Bonnemaison, se vincula a las diferentes entidades ciudadanas des de sus inicios, así como a la promoción de los oficios artísticos, entre ellos el FAD Fomento de las Artes Decorativas, institución creada en 1903, y que actualmente sigue vigente.

A partir de 1914-15, el Instituto impartirá un nuevo plan de estudios que ofrecía un grado de estudios preparatorios de cultura general y bachillerato. La directora pedagógica, Rosa Sensat, propuso como objetivo el “dar a la mujer una base de cultura científica y artística que sea garantía de perfección en su trabajo y que le de posibilidades de luchar con éxito en el ejercicio de su carrera profesional en condiciones de superioridad”.



El número de alumnas fue creciendo a medida que se ampliaba la oferta académica del instituto, con cursos realmente innovadores para la época, como Delineación, impartidos en 1918 por Leonor Ferrer, la primera mujer delineante española y Jefa de la oficina de planos de la Sociedad General de Teléfonos. Otros mucho más tradiciones, como cocina, tuvieron muy buena acogida, y la asistencia masiva de alumnas a estos cursos, hizo plantear al equipo directivo la necesidad de tener un espacio propio. Otros servicios que se ampliaban cada año eran la Biblioteca y la bolsa de trabajo.




El día 8 de octubre de 1922, coincidiendo con el inicio del curso 1922-23, se inaugura el nuevo centro,  en la calle Sant Pere més Baix número 7. El nuevo edificio, permitió que más de 30.000 mujeres circularan libremente por el Instituto. Parecía que nada podía parar este centro, pero a partir de 1930 la deuda económica y el inicio de la guerra se interpusieron en el buen funcionamiento de la institución. Cuando acabó la guerra civil. El consejo directivo del Instituto lo cedió a la Diputación de Barcelona. Durante el franquismo y las primeras décadas de la democracia, el instituto fue ocupado por varias instituciones. Finalmente, en 2003 y por presión de diversos colectivos de mujeres, la sede del Instituto volvió a los orígenes y se convirtió en el actual Centre de Cultura de Dones Francesca Bonnemaison.




Para saber más:



Bibliografia
  • Isabel Segura, Memòria d'un espai. Institut de Cultura i Biblioteca Popular de la Dona, 1909-2003. Barcelona: Publicacions de l'Abadia de Montserrat, 2007.
  • Isabel Segura; Anna Cabó, “Francesca Bonnemaison i Farriols: constructora de un espacio cultural de mujeres”, a Treinta retratos de maestras, Madrid, Cuadernos de pedagogía, 2005.

3 comentarios:

David Mallol F dijo...

Molt interessant el blog i especialment aquest article. Llàstima que només es pugui disposar de versió en castellà. Bonnemaison no se n'hagués sentit orgullosa.

Camila. Monasterio Vidal dijo...

Com funciona el centre de Francesca Bonnemaison ? sen soci? Voldria informaciò
Moltes gracias

Anónimo dijo...

David Mallol. Molt agosarat el teu comentari.
Primer de tot, no es pot parlar en nom d'algú que no siguis tú sense al menys el seu consentiment, però sobretot per raons òbvies.
Segon, ja estem polititzant amb l'etern fascisme decimonònic coses que tenen la seva importància principalment en uns fets, i no en una llengua.
Tercer, en comptes de deixar aquests comentaris essencialment fascistes, hauries de quedar agraït per aquesta publicació.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...